¿…Pero y mañana que comemos?

Lo de comer cada día es un realidad en nuestros, puede que si la crisis lo permite comamos tres veces al día
Últimamente tiendo, si cabe, cada vez más a la exageración.
De la serie: “Piensa un poco antes de hablar, que lo has prometido como buena acción para el 2010”.
Capítulo dedicado a: “¿…Pero y mañana que comemos?”.
Andaba yo, sobre las dos de la tarde, por la cocina, mirando que el arroz no se pasase, tomándome una cerveza con limón, ahora un poquito de queso, ahora un poquito de fuet.
En definitiva esperando comer con tranquilidad.
Pero la tranquilidad es efímera y hay tormentas que no se ven llegar.
Uno tiene que estar atento a las señales. Aunque la confianza nos haga bajar la guardia.
Por ejemplo las preguntas que tiene como respuesta un SI o un NO
-Ella pregunta con voz tierna ¿Cariño le queda mucho al arroz?
-Tu respondes con cierta indiferencia y la boca llena de queso : SI
A lo que ella replica “pues coge el trapo y repasa el polvo”
¿Repasar el polvo? Y eso que es lo que es.
Dejando esto a un lado ya entrare a fondo otro dio, hoy se preparaba la tormenta perfecta.
Ante la pregunta a las dos de la tarde, antes de comer ¿Y mañana que cómenos?
Mi mente, juro que pensó, “cariño lo decidimos después de comer que ahora no sé que me apetecerá mañana que estoy lleno con la cerveza el queso y el fuet, y todavía queda el arroz”
Pero se conoce que dije “y a mí que cojones me preguntas”.
Diez minutos después estaba en el parquin del McDonald’s con tres McFurris.
Conclusión antes de hablar pensar frente a quien estas .
Post data
Esto es aplicable a todos los ámbitos de la vida, no hay que preguntar en un McDonald’s si tienen cóctel de gambas a menos que quieras provocar un sonrisa en tu interlocutor colombiano